Endometriosis y embarazo: dudas frecuentes y recomendaciones
Hablar de endometriosis y embarazo es abrir un espacio de esperanza, dudas y muchas emociones encontradas. Si convives con endometriosis, seguramente te hayas preguntado si será posible quedarte embarazada, si el dolor mejorará o si hay algo más que puedas hacer para cuidar de ti durante esta etapa.
La buena noticia es que hoy sabemos mucho más sobre esta condición y cómo acompañarla desde la medicina, la fisioterapia y el autocuidado. Vamos a resolver las dudas más frecuentes con información clara, cercana y basada en evidencia.
¿Qué es la endometriosis y cómo puede afectar al embarazo?
La endometriosis es una enfermedad inflamatoria en la que el tejido similar al endometrio —que recubre el interior del útero— crece fuera de él. Puede encontrarse en los ovarios, las trompas, el intestino o incluso en la vejiga.
Aunque cada caso es distinto, muchas mujeres con endometriosis comparten síntomas como dolor menstrual intenso, molestias al tener relaciones sexuales, hinchazón abdominal o fatiga constante.
Qué ocurre en el cuerpo con endometriosis
Durante el ciclo menstrual, ese tejido fuera del útero también responde a las hormonas, provocando inflamación, sangrado y, con el tiempo, adherencias (uniones anormales entre órganos). Esto puede afectar al movimiento de las trompas o la calidad de los óvulos, dificultando la concepción natural.
Relación entre endometriosis y fertilidad
Se calcula que entre un 30% y un 50% de las mujeres con endometriosis tienen algún grado de dificultad para quedarse embarazadas. Sin embargo, esto no significa que sea imposible. Todo depende del grado de afectación y del abordaje terapéutico adecuado.
¿Es posible quedarse embarazada con endometriosis?
Sí, es posible. Muchas mujeres con endometriosis consiguen embarazos naturales o mediante tratamientos de fertilidad, especialmente cuando hay un diagnóstico precoz y un acompañamiento profesional adecuado.
Casos leves, moderados y severos
- Leves o moderados: en estos casos, la inflamación o las adherencias son menores, y la probabilidad de embarazo es más alta.
- Severos: puede haber afectación de los ovarios o las trompas, pero incluso aquí, con apoyo médico, es viable lograr el embarazo.
Tratamientos médicos y opciones de fertilidad
Los tratamientos varían desde terapia hormonal para controlar los síntomas hasta cirugías conservadoras que eliminan focos de endometriosis.
En casos de infertilidad persistente, se puede recurrir a técnicas de reproducción asistida como la fertilización in vitro (FIV).
En todos los casos, la coordinación entre ginecología y fisioterapia del suelo pélvico marca una gran diferencia. La fisioterapia puede ayudar a reducir el dolor, mejorar la movilidad pélvica y optimizar la función del suelo pélvico antes del embarazo.

Embarazo con endometriosis: qué esperar y cómo cuidarte
Una vez conseguido el embarazo, la endometriosis no desaparece por completo, aunque muchas mujeres experimentan una mejora significativa de los síntomas debido a los cambios hormonales.
Síntomas y molestias más comunes
Durante la gestación, pueden persistir algunas molestias abdominales o pélvicas. Es fundamental realizar un seguimiento médico regular, cuidar la postura y adaptar el ejercicio físico a cada etapa del embarazo.
Ejercicio físico y fisioterapia durante el embarazo
En FisioFit Mujer recomendamos mantener una actividad física suave y guiada, que puede incluir:
- Ejercicios de movilidad pélvica y respiración.
- Trabajo de suelo pélvico con fisioterapeuta especializada.
- Ejercicios acuáticos o de bajo impacto.
Estos hábitos no solo alivian el dolor, sino que también preparan el cuerpo para el parto y favorecen la recuperación posterior.
Recomendaciones para mejorar la fertilidad y bienestar
Aunque no existe una “cura mágica”, sí hay muchas cosas que puedes hacer para sentirte mejor y favorecer tu fertilidad de forma natural. La clave está en cuidar tu cuerpo de manera integral: alimentación, descanso, movimiento y emociones.
1. Alimentación antiinflamatoria y suplementos
Lo que comes influye directamente en cómo te sientes. Una alimentación equilibrada puede ayudar a reducir la inflamación y crear un entorno más favorable para la fertilidad.
| Prioriza estos alimentos 🥑 | Evita o reduce 🚫 |
| Frutas y verduras frescas | Ultraprocesados (galletas, bollería, snacks industriales) |
| Pescado azul (sardinas, salmón, caballa) | Exceso de azúcares refinados |
| Aceite de oliva virgen extra | Refrescos y bebidas azucaradas |
| Frutos secos naturales y semillas | Grasas trans y fritos |
| Legumbres y cereales integrales | Alcohol y tabaco |
Suplementos que pueden ayudar (siempre con seguimiento médico):
- Omega-3
- Vitamina D
- Magnesio
👉 Recuerda: cada cuerpo es diferente. Consulta siempre antes de tomar suplementos por tu cuenta.
2. Gestión del estrés y descanso reparador
El estrés crónico puede alterar tus hormonas, aumentar la inflamación y dificultar el embarazo. Por eso, cuidar tu mente es tan importante como cuidar tu cuerpo.
Estrategias sencillas que ayudan:
- 🧘♀️ Mindfulness o meditación guiada (5–10 min al día es suficiente).
- 🌬️ Respiración diafragmática: calma el sistema nervioso en pocos minutos.
- 🧍♀️ Yoga suave o estiramientos: mejoran la circulación y reducen la tensión.
- 🛏️ Rutina de sueño regular: dormir bien regula las hormonas y mejora el estado de ánimo.
💡 Un pequeño cambio diario puede marcar una gran diferencia a largo plazo.
Preguntas frecuentes sobre endometriosis y embarazo
¿La endometriosis desaparece durante el embarazo?
No. Aunque muchas mujeres experimentan una disminución de los síntomas durante el embarazo debido a los cambios hormonales, la endometriosis no desaparece.
Es importante saber que, una vez que finaliza el embarazo o la lactancia, los síntomas pueden reaparecer, ya que la enfermedad sigue presente. Esto no significa que el embarazo empeore la endometriosis, pero tampoco la cura. Contar con seguimiento médico especializado durante y después del embarazo puede ayudar a controlar mejor la evolución.

¿Puedo tener un parto natural si tengo endometriosis?
En muchos casos, sí es posible tener un parto vaginal. La clave está en contar con un equipo obstétrico que valore cada caso de forma individual y trabaje junto a fisioterapeutas especializados en suelo pélvico para preparar el cuerpo de forma adecuada.
Una buena planificación permite minimizar riesgos y molestias, favoreciendo un parto respetado y seguro. La preparación física y emocional antes del parto es especialmente importante en mujeres con endometriosis, ya que puede haber más sensibilidad pélvica o antecedentes quirúrgicos que conviene tener en cuenta.
¿La endometriosis aumenta el riesgo de aborto?
Algunos estudios señalan un ligero aumento del riesgo de aborto espontáneo en mujeres con endometriosis. No obstante, este riesgo es generalmente bajo y el pronóstico suele ser muy favorable si se lleva un buen control médico.
Mantener hábitos saludables, realizar revisiones periódicas y contar con un equipo ginecológico especializado contribuye significativamente a reducir riesgos y favorecer un embarazo saludable.
¿Puedo hacer ejercicio si tengo endometriosis y estoy embarazada?
Sí. De hecho, la actividad física adaptada es una gran aliada durante el embarazo en mujeres con endometriosis. Ejercicios suaves y supervisados ayudan a mejorar la circulación, reducir el dolor pélvico y fortalecer el suelo pélvico, lo que facilita el parto y la recuperación posterior.
Lo más recomendable es trabajar con un profesional que adapte el tipo e intensidad del ejercicio a cada etapa del embarazo y al estado físico de la mujer.
¿El tratamiento hormonal impide el embarazo?
Mientras se toma tratamiento hormonal, sí puede inhibirse la ovulación y dificultar el embarazo. Sin embargo, estos tratamientos suelen utilizarse de manera temporal, con el objetivo de preparar el cuerpo, reducir la inflamación y mejorar las condiciones para concebir posteriormente.
Una vez finalizado el tratamiento y con la orientación adecuada, muchas mujeres logran quedarse embarazadas de forma natural o con ayuda de técnicas de reproducción asistida si es necesario.
¿Cuándo debo acudir al fisioterapeuta del suelo pélvico?
Lo ideal es comenzar desde el diagnóstico de endometriosis, incluso si no hay un embarazo en curso. Un fisioterapeuta especializado puede ayudar a prevenir molestias pélvicas crónicas y mejorar la calidad de vida.
Durante el embarazo, este acompañamiento resulta especialmente útil para preparar el cuerpo para el parto, aliviar tensiones musculares y favorecer una mejor recuperación postparto. Cuanto antes se inicie esta preparación, más beneficios se obtienen.
Conclusión: esperanza, información y acompañamiento profesional
La endometriosis y el embarazo no son incompatibles. Con diagnóstico precoz, un abordaje integral y acompañamiento profesional, muchas mujeres logran vivir un embarazo pleno y saludable.
La clave está en informarte, cuidarte y rodearte de profesionales especializados en salud femenina.
Recuerda: cada cuerpo es único, y con la atención adecuada, tu camino hacia la maternidad puede ser más amable y consciente.